Lluís Canut
La retirada del dorsal '16' de David Barrufet fue mucho más que un homenaje. Fue un homenaje total, porque la figura del gran 'Barru' va más allá de la sección de balonmano y de la gente del Palau, y acabó siendo un merecido reconocimiento de todo el club. Así lo testimonió la presencia de los capitanes de todos los primeros equipos profesionales Carles Puyol, Roger Grimau, Alberto Borregán y Xavi Rodríguez, porque se trataba de rendirle tributo al jugador que en los 24 años en que defendió la portería de balonmano se erigió en el deportista con más títulos ganados de toda la historia del Barça, con un total de 71. Desde la grada elevada que ocupan los 'Dracs' en el Blaugrana, de la que difícilmente se podían divisar las paradas de Barrufet en el Gol Sur, colgaba una pancarta en la que se leía "Cuando acaba la historia empieza la leyenda", y la escrita por David será difícil de igualar.
Con la de Barrufet, junto a las de Sagalés, Masip, Grau, Urdangarín y O'Callaghan, en las paredes del viejo Palau ya son seis de balonmano las camisetas que cuelgan, a las que se han de sumar las cuatro de héroes del baloncesto como Epi, Jiménez, Solozabal y Dueñas. Desde que en 1989 Migueli colgó las botas, no ha habido ningún partido de homenaje a otro futbolista del Barça. En vista del equipo de leyenda del que estamos disfrutando actualmente, se debería considerar que el Camp Nou sea el escenario de más que merecidos homenajes cuando los cracks más emblemáticos del equipo de Pep se retiren. Y de paso plantear a los organismos correspondientes la posibilidad de retirar algunos dorsales, como el '5' de Puyol, el '6' de Xavi, el '8' de Iniesta o el '10' de Messi, que deberían ser patrimonio de estos cracks de leyenda