El Atlético sigue progresando en la contratación de Juanfran como recambio de Simão . Es el jugador elegido para cubrir una ausencia que Quique ha exigido reparar para poder afrontar la Liga con opciones de acabar entre los cuatro primeros. Pese a que públicamente Atleti y Osasuna siguen sosteniendo que las posturas están lejanas y que probablemente no se concrete el traspaso, lo cierto es que lejos de los focos, ambas entidades siguen tratando de acordar un negocio que no será nada sencillo, pero que se acabará haciendo, apuntan fuentes cercanas a estas conversaciones.
Económicamente no hay opción a que se vayan. Otra cosa es que se los lleven regalados. Las situaciones económicas de los clubs no están para muchas flores y no creo que Osasuna los deje ir sin pagar, como se dice en estos casos, lo mínimo establecido por la ley, advirtió ayer José Antonio Camacho en el regreso de Osasuna, con Juanfran a la cabeza, al trabajo en el Tajonar. Un mensaje muy presidencialista el de un entrenador que vino a alertar al club rojiblanco de que deberá pagar más de lo que propone para llevarse a un futbolista indiscutible para él.
El centrocampista alicantino, que acaba contrato en junio de 2012, tiene decidido no forzar su salida, si bien ya ha mostrado su deseo de abandonar Osasuna para poner rumbo al Manzanares. Entiende que se le presenta una oportunidad inmejorable de crecer deportivamente y no quiere dejarla esperar.
Hasta el momento, las posiciones están alejadas, pero el interés atlético y el deseo de Juanfran obligan a un entendimiento que Osasuna quiere cifrar lo más alto posible. El club rojiblanco está decidido a hacer un esfuerzo por él, destinando lo ingresado en la venta de Camacho al Málaga, a punto de concretarse, y en el ahorro que ha supuesto la salida de Simão rumbo al fútbol turco. Lo quieren para evitar la palpable sensación de que el equipo se ha debilitado con la marcha del extremo luso.
Quique lo quiso en Getafe
El entrenador rojiblanco ha demandado la contratación de un Juanfran que siempre ha sido de su agrado. Lo conoce de las categorías inferiores del Real Madrid y lo aconsejó para el Getafe que él dirigió en la 2004-05, si bien no se concretó.
En esta ocasión, Quique confía en que Juanfran sí se convierta en su pupilo. Espera que lo sea lo antes posible, más aún si se supera el envite copero ante el Espanyol y se vive otro mes de enero con un sinfín de encuentros. Prosiguen las negociaciones