Además de ser un técnico polémico, Mourinho tampoco suele llevarse muy bien con los colegiados. La roja que le mostró ayer Paradas Romero hay que sumarla a las siete que ya acumula desde que decidió ser entrenador.

Durante su etapa en Portugal (Benfica, Leiria y Porto) fue expulsado en tres ocasiones, curiosamente por el mismo árbitro, Pedro Proença. En Italia, en las dos temporadas que estuvo en el Inter, se 'superó' y vio la roja cuatro veces: ante la Sampdoria, Fiorentina, Cagliari y la última el 7 de diciembre de 2009 contra la Juve.

Multado ante el Barça

Una buena 'cosecha' para su prolífica carrera como técnico[/LADTEXT], pero mucho peor fue lo que protagonizó en 2005, cuando aún era entrenador del Chelsea. Después de un partido de octavos de final de la Champions contra el Barcelona disputado en el Camp Nou, en el que Drogba acabó expulsado, Mourinho acusó al entonces técnico azulgrana Frank Rijkaard de haberse reunido con el árbitro Anders Frisk durante el descanso. La polémica suscitada enervó tanto a los aficionados ingleses que el colegiado tuvo que retirarse debido a las continuas amenazas de muerte que recibió. Como castigo, la UEFA impuso a Mourinho una sanción de 20.000 francos suizos y dos partidos de sanción.

Valdano no recurrirá si Mou puede perderse el clásico

Jorge Valdano, director general del Real Madrid, dijo que según el contenido del acta que redacte el árbitro del partido Paradas Romero, “recurriremos o no la expulsión de José Mourinho. Si merece la pena, sí, si no, no”, aclaró, antes de ironizar sobre si un recurso provocase que el luso tuviese que cumplir la sanción en el 'clásico'. “Eso es descartable. En Barcelona le necesitamos al pie del cañón”, indicó con una sonrisa, sin entrar a valorar la actuación arbitral