Thor Hushovd es elprimer noruego que se proclama campeón del mundo, lo cual tiene el mérito añadido de ganar corriendo sin equipo. Ayer, en Melbourne, tomaron la salida tres noruegos: el a la postre campeón, Edvald Boasson Hagen y Alexander Kristoff.
El gigante escandinavo (1,83 y 81 kilos) es un dechado de potencia y se mueve como pez en el agua en las llegadas donde previamente los 'sprinters' puros han quedado sin opciones. Es, como se dice en el argot, un 'llegador', ciclistas que pasan bien cotas medias y que en las clásicas tienen un terreno abonado.
Nacido en Arendal en enero de 1978, Hushovd se inició en el esquí nórdico, deporte nacional en su país. La bicicleta la utilizaba para coger fondo que luego emplearía en los senderos nevados. A finales de los noventa se decidió por el ciclismo, corriendo por el Sykkelklubb. En el Mundial de Valkenburg se proclamó campeón del mundo de contrarreloj sub'23, tres días antes de que Ivan Basso ganase la prueba de fondo en esa categoría. Fue su tarjeta de presentación a nivel mundial y en abril de 1999 ganó la primera edición del GP Ringerike, carrera por etapas noruega en la que se impuso, además, en tres de las cinco etapas.
Crédit Agricole le echó el lazo y entró a prueba en septiembre de ese año en el equipo francés que dirigía Roger Legeay. En esa escuadra ha desarrollado casi toda su carrera, abandonándola el año pasado cuando desapareció para fichar por el Cervélo. Pronto empezó a dar victorias al Crédit Agricole y en su segundo Tour de Francia (2002, el año anterior abandonó en la 12ª etapa) ganó su primera etapa en la ronda gala, donde se ha llevado dos veces (2005 y 2009) la regularidad. Ha ganado etapas en las tres 'grandes', la Gante-Wevelgem y el año pasado alzó los brazos dos veces en Barcelona, una en una etapa de la Volta y la otra en la del Tour. Sueña con la París-Roubaix, donde este año fue segundo y en 2009, tercero.
En 2011 correrá con elGarmin estadounidense y probará a ganarla con el maillot de arco iris, algo que sólo han logrado Rik Van Looy (61 y 62), Eddy Merckx (68), Francesco Moser (78) y Bernard Hinault (81)