Fernando Llorente y Javi Martínez serán mañana los grandes protanistas de la actualidad rojiblanca por su regreso tras proclamarse campeones del mundo y disfrutar de unos días de vacaciones. Pero no serán sólo ellos los que retormarán a Lezama, ya que llegará Iker Muniain después del Europeo sub-19 y otro león, Ander Murillo, también tendrá que presentarse en Lezama al haber acabado sus vacaciones, que han sido algo más tardías que las del resto por haber acabado después la Liga de Segunda División.
El defensa donostiarra, que fue descartado por Joaquín Caparrós para realizar la pretemporada a pesar de la buena campaña que realizó en su cesión al Salamanca, ha estado sondeando el mercado para encontrar un nuevo destino, pero sin suerte. De momento, mañana está citado para reincorporarse a los entrenamientos.
A pesar de que la cosa se ha ido complicando y aún no sabe qué hará, Murillo, al que le resta un año de contrato con el club bilbaíno, es optimista y cree que sólo es cuestión de tiempo que se resuelva esta situación. De momento, está tranquilo, porque hay ofertas y vamos en la buena dirección para conseguir lo mejor para todos.
Primero fue el mismo Salamanca el que mostró interés en que volviera a ser cedido, pero tras una fugaz prueba con el Sheffield United que no satisfizo al jugador rojiblanco, el Tenerife y el Valladolid fueron los dos conjuntos que parecían más dispuestos a incluir a Murillo en sus respectivos planes para retornar cuanto antes a Primera.
Pero mientras que algunos compañeros que tampoco contaban en los planes inmediatos de Caparrós, como Iban Zubiaurre o Xabi Etxeita, encontraban acomodo en las plantillas del Albacete y del Elche respectivamente, los días han ido pasando y el jugador, que acaba de cumplir 27 años, no ha logrado concretar ninguna de las proposiciones que le iban llegando.
Le gusta la propuesta celeste
El último equipo que ha puesto una importante oferta sobre su mesa es el Celta. El cuadro vigués, que esta temporada dirigirá desde el banquillo Paco Herrera, está tratando de confeccionar un equipo de garantías para no pasar tantos apuros y volver a soñar con el ascenso y se ha fijado en Murillo para completar la nómina de defensas.
La propuesta celeste parece haberse convertido ahora en la mejor considerada por el futbolista, a pesar de que por el momento no hay ningún tipo de acuerdo. El Celta es un equipo que me gusta mucho, ya que conozco bien la ciudad y también me parece atractivo su proyecto futbolístico, explica Murillo, mientras espera el reencuentro con con el vestuario rojiblanco, que conoce muy bien tras las ocho temporadas que ha pasado como jugador del primer equipo