África entera vibra con el triunfo de Ghana

Ghana no fue quien ganó a estados Unidos y se clasificó para cuartos de final. Fue África entera, al manos la parte del Continente Negro que gritó al unísono “Yes!”, que es como se cantan aquí los goles al estilo inglés. Todos los medios sudafricanos destacaban hoy en primera página el triunfo de Ghana. Los comentaristas de televisión, emocionados, acabaron gritando en la transmisión: "¡África,2-USA, 1, Ghana está en cuartos de final!".

Y es que Ghana, la selección del peculiar técnico serbio, Milovan Rajevac, ha hecho historia al convertirse en la tercera selección africana que consigue llegar a cuartos de final de una Copa del Mundo tras Camerún en Italia-90, que cayó ante Inglaterra en Nápoles. Fue en la prórroga en un gol de Gary Lineker, de penalti. Esta Ghana ha entrado en el corazón de los africanos como aquel Camerún de Thoma N'Kono o Roger Milla, sin olvidarse del malaguista Cyrile Makanaky.

Milovan Rajevac, despeinado como siempre, sudoroso, pero feliz dijo, tras ganar a EE.UU que "esta victoria es inmensa, Ghana está entre los ocho mejores del mundo y los chicos saben abordar la competición".

Luego agradeció el apoyo firme de la afición local: "Esta gente maravilolosa, como todo nuestro país, merece que Ghana llegue más lejos, que no cese la felicidad actual".

El héroe nacional, de todos los africanos, el delantero del Rennes Asamoah Gyan, casi no podía hablar de la emoción: "Soy inmensamente feliz, he marcado por Ghana, por África, para hacer feliz a todos los africanos, que se sientan orgullosos de serlo. Hemos ganado por todos nuestros hermanos eliminados". Gyan añadió que "ahora debemos seguir haciendo historia, Uruguay tiene muy buen equipo pero nosotros también y tenemos la ventaja de que toda África está detrás nuestro, nos apoya".

Como decía el defensa John Pantsil, "debemos dar gracias a Dios por habernos permitido hacer historia, por llegar a cuartos de final un país como Ghana que le ha ganado a una nación tan grande y poderosa como Estados Unidos".

Los jugadores de Ghana fueron al medio del campo, hicieron un círculo y parecieron rezar, dar gracia spor lo conseguido. Luego explotaron en una alegría inmensa, se abrazaban entre ellos, con los 'yankees', hasta con el público porque alguno fue hasta las gradas. Las banderas de Ghana revoloteaban por el estadio de Rustenburgo y era bonito ver como el público norteamericano les aplaudía y felicitaba. Ghana había hecho historia, pero no quiere acabar aquí.

Tanta era la euforia desatada que Samuek Inkoom, el excelente lateral del Basel, de sólo 20 años, aseguró que "ahora vamos a por la final, queremos ganar la Copa del Mundo". Gritaba como un poseso, feliz y contento. Luego añadió, más calmado, que "estamos listos para vivir el último sueño".

Inkoom dijo convencido que "ahora vamos a ganar a Uruguay, se lo he dicho al mister, al señor Milovan Rajevac. Ya antes profeticé que íbamos a vencer a los USA".

Inkoom desveló que "nuestro secreto es que somos como una gran familia, somos más que amigos, somos como hermanos y unidos nos atrevemos con todo y contra cualquier equipo".

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