El portero y el segundo español que ha representado más veces a la selección española, Iker Casillas, se ha quejado del balón oficial del Mundial, del que ha dicho que es más adecuado para la playa que para una fase final de una Copa del Mundo .
Los españoles probaron el esférico el sábado, cuando vencieron 3-2 a Arabia Saudí en un encuentro amistoso. "Es como un balón de playa", dijo el domingo el capitán de la selección a los medios españoles respecto a un balón que describió como de movimientos impredecibles y muy "ligero". Aunque manifestó que pese a ese inconveniente, "hay que adaptarse, pero queda tiempo".
"No sólo se quejan los porteros, también los jugadores de campo. Es un poco triste que una competición como un Mundial tenga un elemento tan importante como el balón de esas pésimas condiciones", añadió. El centrocampista, Xavi Hernández, respaldó a Iker y aseguró que "es cuestión de acostumbrarse, pero es verdad que se mueve mucho".