Menorca sirvió ayer como marco de la despedida de Joseba Etxeberria, uno de los grandes del Athletic. El elgoibartarra reunió a sus amigos para cerrar sus quince años como rojiblanco. El partido con gente de dentro y de fuera de la casa bilbaína tuvo su interés. Nadie quería perder, pero David López marcó la diferencia poco antes de que el Gallo se despidiera hasta siempre como futbolista en activo. El banquillo le espera.
Iribar afrontó este envite con una alineación titular bastante similar a las de Caparrós. Faltaban los internacionales Javi Martínez y Llorente, pero el ayer entrenador del Athletic tiró de Orbaiz en el centro del campo y de Etxebe, el homenajeado, en punta. Valverde, por su parte, improvisó sobre la marcha. Larrazabal y Urrutia, pese a no estar en las debidas condiciones físicas, se sumaron a la fiesta a ras de césped, aunque pasado el primer cuarto de hora cedieron sus puestos a Larrainzar y Sergio, respectivamente. Ezquerro tuvo que abandonar el campo lesionado. Tiko ocupó su lugar.
Los amigos de Joseba tardaron en coger el ritmo al partido. Los leones, mucho más compenetrados y entrenados, impusieron su ley de salida, aunque sin llegar a crear grandes apuros a Aranzubia. Un mal blocaje del ahora meta del Deportivo permitió, sin embargo, abrir el marcador a Toquero.
Los tres cambios ya comentados en el once de Valverde dieron mayor empaque a un equipo que con Tiko, Sergio, Baraja y Alkiza en el centro del campo empezó a tocar la bola con gusto y sentido. El Athletic, mientras tanto, estaba empeñado en que Etxebe consiguiera hacer gol. Alkorta y Aranzubia, unas veces, y la falta de puntería, en otras, impidieron al capitán firmar su última diana como rojiblanco.
Sergio, en cambio, logró dos auténticos golazos antes del descanso. El medio del Deportivo colocó el balón por ambas escuadras ante su propia sorpresa y la del resto de los presentes. Iraizoz tuvo que limitarse a aplaudir ambos tantos.
El segundo tiempo arrancó con novedades en ambos bandos. La más significativa consistió en el cambio de equipo de Joseba Etxeberria. El capitán pasó a jugar con sus 'amigos' mientras que en los leones sólo repetían Gurpegi, como central, y Amorebieta, como lateral zurdo. Zubiaurre y Aitor Ocio completaron la defensa. Valverde también tiró de banquillo en el intermedio.
Armando y Aranzubia compitieron a lo largo de este periodo a ver quién de los dos realizaba la mejor parada. Bolo y Etxebe se encargaron de poner a prueba al meta de Sopelana. De Cerio y, sobre todo, De Marcos, al de Fuenmayor. Iñaki Muñoz, con un tiro desde fuera del área marca de la casa, acabó firmando el empate con tiempo todavía por delante para el final del encuentro David López, a falta de nueve minutos, rompió la igualdad al aprovechar un buen pase de Muñoz. Etxebe, acto seguido, fue sustituido llevándose la ovación de la tarde y el recuerdo de todos sus amigos
Muñoz cierra su etapa con un espléndido gol
Joseba Etxeberria no fue el único león que se despidió ayer de la disciplina del Athletic. Armando e Iñaki Muñoz también jugaron sus últimos minutos como rojiblancos. Yeste, otro de los que cambiará de aires, no se vistió de corto.
Armando volvió a dejar constancia de sus grandes reflejos. El portero de Sopelana hizo buenas paradas, sobre todo una a tiro del propio Etxebe. Nadie fue capaz de batir su puerta.
Muñoz también tuvo su protagonismo en este segundo tiempo. El navarro marcó un espléndido gol con un tiro con la zurda desde fuera del área. Luego dio el pase del tanto de la victoria a su compañero David López