El 20 de mayo es un día especial para Ronald Koeman. Es algo así como su segundo cumpleaños. Esa fecha está grabada en su mente, igual que el gol inolvidable que le dio al Barça su primera Copa de Europa en el mítico estadio de Wembley, ya derribado y reedificado. Ronald festejó ayer los 18 años del partido glorioso de Londres en el restaurante Fish. Viajó junto a su hija Debbie a la Ciudad Condal, donde regresó para presentar el libro de su amigo Lluís Canut (Els secrets del Barça).
Felicidades por el 'aniversario'.
Muchas gracias. El 20 de mayo es especial para mí, igual que para todos los barcelonistas. Me trae tantos y buenos recuerdos.
Cierre los ojos... ¿Qué ve?
La pelota entrando en el marco de Pagliuca, la locura que se desató entre nosotros, en las gradas de Wembley, en toda Catalunya (según me explicaron luego). La tremenda alegría que significó para todo el Barça.
Ayer lo celebraron con Hristo Stoichkov y un numeroso grupo de amigos.
Sí, fue bonito, porque hubo un pastel con la foto de Hristo y mía, sonando el himno del Barça. Con la narración del gol de Wembley por megafonía. Fue muy emocionante.
¿Qué destacaría luego de haber visto su gol por vídeo miles de veces?
Me llamó la atención ver como Gianluca Vialli, que ya estaba en el banquillo, se tapó la cabeza con una toalla para no ver el lanzamiento, fue como si tuviera un presentimiento de que iba a meter gol.
La leyenda urbana dice que el día anterior practicaron la falta y no entró nunca.
Es cierto que practicamos las faltas, como hacíamos siempre. Pero no hubo nada preparado. Era el destino. Fue una cuestión de instinto. Salió bien, fue gol y ya está.
No hay justicia, muchos niños en Catalunya deberían llamarse Ronald.
Ja, ja, ja. Ya se por qué lo dice. Pero también deberían llevar el nombre de mis compañeros, la Copa de Europa la ganamos todos.
¿Se siente querido en Barcelona?
Mucho. En realidad es mi segunda casa. Siempre que puedo vengo. Tengo muchos amigos aquí. Mi familia también es feliz cuando venimos. Fue una etapa muy bonita de mi vida.
En cambio, cuando llegó fue muy criticado.
Sí, fueron momentos difíciles. No jugaba al principio en mi posición y sufrí mucho. Luego, Johan Cruyff me cambió a mi sitio natural y todo fue mucho mejor, la verdad.
¿Ve algún sucesor suyo en el Barça?
Si acaso Gerard Piqué, que sale con el balón e intenta jugar siempre en largo o corto en el inicio de la jugada. Pero quizá es más defensa que yo y por mi parte era mejor pasador. Eso sí, cuando Piqué va al ataque parece un delantero por su eficacia y técnica de remate.
¿Qué le parece el Barça de Pep?
Un espectáculo, da gusto verles jugar, cómo tratan el balón, la velocidad con que ejecutan los movimientos, su técnica. Además, tienen grandes jugadores. Es un espejo en que deberían mirarse otros equipos.
¿Le ha sorprendido Guardiola como entrenador?
No, Pep ya le gustaba mucho hacer de 'técnico' cuando jugaba. Era como una esponja que asimilaba conceptos, que preguntaba, que opinaba. Se veía que podía ser un gran entrenador.
Usted ha entrenado a David Villa en el Valencia. ¿Es un buen fichaje?
Excelente. El Barça ha fichado a un gran goleador. Es un delantero muy moderno en sus movimientos. De cualquier jugada inventa un gol. Creo que por sus cualidades parece nacido para jugar en este Barça. Va a aportar muchas cosas que se echaban de menos tras la marcha de Samuel Eto'o.
¿E Ibrahimovic?
Le entrené en el Ajax muy joven, recién llegado del Malmö. Es un gran jugador, de fuerte carácter. Necesita tiempo y confianza. Tiene cualidades para jugar en el Barça, posee mucha técnica y por su envergadura no es lento. Tampoco es cierto que no pueda asimilar el esquema de Pep porque en el Ajax no jugaba de 'nueve' estático, estaba en continuo movimiento.
¿Cuántas veces ha pensado en lo cerca que estuvo usted del banquillo del Barça cuando Joan Laporta ganó las elecciones?
Entonces muchas veces. Me hacía una tremenda ilusión. Luego, debes adaptarte a la realidad de cada momento. Pero, indudablemente, hubiera sido feliz entrenando al Barça. Tengo varias ofertas para entrenar pero aún no he decidido qué voy a hacer