'Europasión' por el Atlético de Madrid

El primer día se vendieron 6.474 localidades; sólo quedan ya 2.552

La cola para las entradas--de--la--final de Hamburgo dio la vuelta al estadio

La cola se veía desde el Puente de San Isidro. La línea de aficionados daba la vuelta al Calderón. Increible. 24 años sin una final europea dan para acumular mucha ansiedad e ilusión; una ilusión que en el día de ayer desbordó las previsiones de todo el mundo. En torno a 4.000 hinchas colchoneros se pasaron por las taquillas en el primer día de apertura para la venta de entradas para la final de Hamburgo. Se pusieron a la venta 9.026 entradas. A la apertura de las mismas, la cola comenzaba en la puerta 36, en el Fondo Sur y rodeaba el coliseo colchonero. En total, casi cinco horas para aguardar turno si uno comenzaba en ese punto. Cinco horas, más las que hubiese tocado esperar hasta las 10.00 h de la mañana, hora de inicio.

Luis Miguel, vecino de Illescas, y primero de la cola había acudido a las 13.30 h del lunes. Es decir, le costó 20 horas y media hacerse con las ansiadas entradas. “Claro que ha merecido la pena. Llevo toda una vida esperando una final así”, apuntaba este aficionado ataviado con una bufanda del Bayern de Munich, equipo que precisamente evitó al Atlético levantar la Copa de Europa. “Es la única que tenía en el coche y es roja, ha hecho mucho frío”, se excusaba.

A las 24.00 horas de ese mismo lunes ya eran casi un centenar de hinchas los que aguardaban en los aledaños del Calderón. Se autogestionaban mientras unos empleados del club colocaban las vallas en la zona de taquillas. Cada hora pasaban lista y el que no estaba por allí quedaba borrado. A eso de las 5.00 h de la madrugada comenzó a formarse la cola, unas 500 personas, que finalmente quedó configurada alrededor del estadio a las 9.00 h de la mañana. A la hora de comer aún había gente a la altura de la tienda oficial del club. Y eso que en el día de ayer, el turno era preferencial para los abonados, tuviesen o no Abono Total, desde el número 1 y hasta el 3.203, así como para los abonados que tuviesen el Abono Total comprendidos entre 3.204 y el 5.000.

Siete coches patrulla y una treintena de agentes de la Policía Municipal y Nacional vigilaban que todo saliese bien. Asimismo, el club se reforzaba en oficinas, en atención telefónica y en taquillas para atender el elevado número de aficionados. Las colas se disiparon a eso de las 18.30 horas, ya sin las entradas más económicas. Al cierre de esta edición se habían vendido 6.474 localidades, por lo que quedan apenas 2.552. El próximo jueves 6 se volverán a abrir taquillas, en este caso exclusivamente para aficionados con Abono Total del 5.001 al 15.000.

La jornada sirvió para que las distintas agencias de viaje también ofreciesen vuelos para la cita. Multitud de folletos informaban sobre precios y condiciones; mientras que Viajes El Corte Inglés (VECI) y la Agrupación de Peñas, medios oficiales, trabajaban a destajo. La Agrupación había cubierto el 60 por ciento de las 2.300 plazas que tenía previstas (en total planea 10 chárter); mientras que VECI había vendido en torno a los 4.000 viajes.

Quique no tapa la euforia

El técnico colchonero se refirió a la pasión vivida por la afición para señalar que le parece bien. “Yo no quiero que se controle ninguna euforia. Nosotros debemos estar ajenos, pero quiero que los hinchas estén muy felices y muy ilusionados. Debemos tomar conciencia de que este equipo puede levantar pasiones”, apuntó

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