El fallecimiento del presidente honorario del COI, Juan Antonio Samaranch, fue puntual y ampliamente recogido en las 'home' de todas las ediciones online de los principales medios de comunicación. En el ámbito latino los elogios al que fuera máximo mandatario del Olimpismo son unánimes; en el ámbito francés y anglosajón, sus principales detractores, se debaten entre el exitoso revitalizador económico del olimpismo y los escándalos de corrupción de final de mandato.
'Gazzetta dello Sport' destaca el adiós a Samaranch, el señor de los cinco aros. Considerado un latino moderado de caracter gentil y complaciente, de inmediato mostró una feroz determinación a enderezar la barra olímpica, llamando a competir en pruebas olímpicas a las multinacionales interesadas en el deporte, y haciendo fluir hacia Lausana montañas de dinero invertidas en su criatura.
'Il Corriere della Sera' también destaca su faceta más positiva: Adiós a Samaranch, el señor de los Juegos. Murió en Barcelona a los 89 años. Dirigió el COI de 1980 a 2001 construyendo el Olimpismo del siglo XXI.
El brasileño 'O Globo' asegura que la era Samaranch fue una de las más intensas en la historia del deporte olímpico. Tuvo que lidiar con boicots políticos, la aceptación del profesionalismo, la explosión de las marcas y negocios en el deporte y la plaga del dóping. Pero fue en este período también que el deporte olímpico alcanzó el auge de su popularidad
'L'Équipe' destaca: Muerte de Samaranch, se pasa una página y Samaranch, una vida consagrada al COI.
Para 'Le Monde', si dio al COI el peso político y económico que tiene hoy en día, también su funcionamiento fue de los más opacos. Durante su reinado acusaciones de corrupción se acumularon en contra de la institución.
Para la cadena estadounidense CNN, Samaranch ejerció la presidencia marcada por el éxito y el escándalo. Un éxito económico sin precedentes dio seguridad financiera al movimiento olímpico, potenciando al máximo la televisión y contratos de patrocinio. El final, ensombrecido por escándalos de ética.
Y según la BBC inglesa, se le atribuye el rescate de los Juegos Olímpicos y convertirlos en el fenómeno mundial que vemos hoy. Sus dos décadas al frente del COI han sido vistas como un gran éxito, pero ensombrecidas por acusaciones de corrupción dentro de la organización y sus vínculos con el dictador fascista Franco en su tierra natal
Las banderas de la sede del COI, del Museo Olímpico y de los edificios oficiales de Lausana ondearon ayer a media asta. El alcalde Daniel Brelaz afirmó que su ciudad le debe mucho a Samaranch; ejerció un papel extraordinario en el desarrollo del COI y en su implantación en Lausana. Le dio un gran dinamismo al cantón de Vaud y a la región. Quiero expresar mi reconocimiento a un hombre caluroso y abierto. Brelaz desautorizó a quienes criticaron su pasado bajo el régimen franquista, y dijo que sus logros posteriores merecen más una estatua que críticas simplistas