La eliminatoria de la Europa League entre Atlético de Madrid y Valencia no acabó el pasado jueves. Ni mucho menos. La nefasta y decisiva actuación del colegiado alemán Florian Meyer no tapa tampoco las evidentes carencias de los dos conjuntos, el raquítico riesgo de ambos entrenadores y un rosario de declaraciones que siempre quedarán en la memoria de todos quienes actuaron o presenciaron el choque del Calderón.

Cuando aún resonaban los lamentos de los ché salieron los dos presidentes a la palestra. Cabe recordar expresiones como “la próxima vez que venga aquí no traeré reloj” (César) o “la UEFA debe tomar nota de lo que sucedió” e incluso “quien se equivoca lo debe pagar, los árbitros también” (David Navarro) aunque eso sólo fue el aperitivo de las declaraciones de los máximos responsables de los dos clubs.

La originalidad e ironía es la especialidad del presidente rojiblanco, Enrique Cerezo. Por no ver ni apreció el penalti mundial sobre Zigic: “La verdad es que no lo vi, pensé que había pitado fuera de juego. ¿Cuántas camisetas se rompen durante una temporada en un campo de fútbol?”, comentó no sin antes recordar también las injusticias que ha tenido que soportar su equipo algunas veces. “En situaciones peores he visto cosas peores en contra del Atlético: tres penaltis, cinco penaltis que no nos han pitado y no pasa nada; el Atlético sigue vivo y funcionando”, añadió.

Cerezo bromeó con las palabras sobre el reloj de César -“si se queda desnudo tanto tiempo parado, se va a enfriar”-, y zanjó las posibles diferencias con su colega, Manuel Llorente, con quien compartió asiento en el palco. “Llorente es un caballero, sabe estar donde tiene que estar, igual que tienen que estar todos los profesionales que se dedican a esto”, sentenció. Y fue radical cuando apareció el nombre del futuro rival (Liverpool) y, más particularmente, Fernando Torres. “Cualquier pregunta sobre Torres... Juega en el Liverpool, al que el Atleti quiere ganar '¿capito?'. Juega en los 'reds', no aquí”, acabó.

Manuel Llorente, presdiente valencianista, se remitió a un comunicado oficial. “Estamos tristes, pero hay que seguir hacia adelante tras las decisiones arbitrales sufridas”. Ahora lo que espera es que “el grave perjuicio sufrido y reconocido de forma unánime, dentro y fuera del valencianismo, sirva para concienciar a las autoridades futbolísticas y arbitrales de la responsabilidad que tienen de acompañar el crecimiento de la competición con un aumento del nivel de sus jueces”

La final de Copa, el 19 de mayo en Mestalla

MADRID - La final de la Copa del Rey, que enfrentará a Atlético de Madrid y Sevilla, se jugará con casi toda seguridad el miércoles 19 de mayo en el Estadio de Mestalla (Valencia), según fuentes de la Federación Española. La decisión de jugarse en Madrid se descartó por la Cumbre de Jefes de Estado de la Unión Europea con los de Iberoamérica, que se celebra del 16 al 18 de mayo y que requiere de un gran despliegue de seguridad que impedirá la celebración simultánea de un acto como la final. La Delegación del Gobierno en Valencia dio ayer el OK a la fecha y salvo nueva sorpresa, la final se disputaría en Mestalla el 19 de mayo.

Por otro lado, la voluntad es que ambos equipos puedan contar con sus internacionales, ya que del 16 al 23 de mayo la FIFA fijó un periodo de vacaciones para todos los mundialistas. No obstante, no será hasta la semana siguiente cuando se concentrarán con las selecciones, como el caso de España, previsto para el día 25. Un total de 12 internacionales, entre ambos equipos, quedarían afectados. El director general del Sevilla, José María Cruz, explicó que “habrá que interpretar la circular de la FIFA, pero existe una condición de los clubes de disputar la final con los internacionales”.

En caso de que el Atlético quedara eliminado de la Europa League ante el Liverpool, podría activarse el plan B, con la final el jueves 13, en Madrid