Pienar: "Sudáfrica está preparada"

Entrevista al mítico capitán de la selección de rugby que inspiró 'Invictus'

François Pienar (Bloemfontein, 1967) fue el capitán de la selección de Sudáfrica de rugby que ganó el Mundial'1995 y que consiguió, gracias a su amistad con Nelson Mandela, que el país vibrara con el equipo sin barreras raciales cuando aún había secuelas de ya abolido 'apartheid'. 'Invictus' habla de la extraordinaria relación entre Pienaar (Matt Damon) y Mandela (Morgan Freeman). Y no es causalidad que se haya estrenado en 2010: hay Mundial y Sudáfrica necesita volver a estar unida.

Sólo he visto la película una vez, cuando se estrenó en Los Ángeles, con Matt Damon, mi esposa e hijos y unos buenos amigos nuestros. Me emocioné en varios pasajes, sobre todo con la escena en la que 'Pienaar' visita la celda de Mandela en la cárcel de Robben Island. Matt me había preguntado cómo había sido ese momento, y yo intenté transmitirle mis sensaciones. Cuando vi lo que hacía en pantalla, cómo estrechaba los brazos entre pared y pared de aquella de aquel minúsculo habitáculo, no pude reprimir las lágrimas. Lloré sin parar . Mis chicos no daban crédito.

¿Cómo nació su amistad con Nelson Mandela, 'Madiba'?

No sé por qué Mandela me llamó para que tomara el té con él en 1994, no sé por qué me llamó a mí. No me he parado a pensarlo. Lo hizo y me siento bendecido.

'Madiba' fue importante para aquel Mundial en casa y su fuerza también acompaña el de fútbol...

Ojalá Mandela no se nos vaya antes de la Copa del Mundo. Necesitamos la 'magia Madiba' para que todo vaya y salga bien. Sudáfrica está preparada, pero él nos hace falta.

¿Cómo fue aquel primero encuentro?

Sólo hablamos del Mundial de rugby dos días antes de nuestro debut con Australia. En aquella charla ni salió el tema. Hablamos del deporte en general, del apartheid. Me preguntó por mis padres, mis ideas. Me explicó que los responsables de Barcelona'92 le sobornaron: le dijeron que si venía a la ciudad habría más plazas olímpicas para los atletas sudafricanos. Me dijo que contaba con nosotros para fortalecer Sudáfrica a través del Mundial de rugby; le dije que sí, pero a cambio le pedí que nos acompañara a competir a Nueva Zelanda. Es una persona increíble, maravillosa; hace poco me invitó a su casa de Johannesburgo. Tomamos té y charlamos. Hay otro Mundial sudafricano en puertas...

¿A usted gusta el fútbol?

En el colegio lo practicaba, jugaba de centrocampista. Es un deporte que me apasiona. Sigo mucho al Arsenal y me encanta Cesc, ¡cómo no!

¿Será un éxito Sudáfrica'2010?

Tenemos que llegar al corazón y a la mente de las personas. Seremos un magnífico anfitrión.¿Inseguridad? Si te sensibilizas, no te pasará nada.

¿La gente del rugby, tradicionalmente blanca, apoyará al fútbol, considerado más el deporte de la población negra?

Claro que la gente del rugby se volcará. En casa mismo ya hay un debate sobre qué selección hay que animar; a los 'bafana bafana', por supuesto; seguro que pasan ronda.. Y están España, que engancha por su fútbol maravilloso, y Brasil, Está Italia. Està Inglaterra, aunque habrá quien discrepe. Yo seguiré los partidos. Varias televisiones me han propuesto ejercer de comentarista.

¿Qué más destacaría de 'Invictus'?

Realmente lo pusimos todo de nuestra parte. Queríamos cantar el nuevo himno, con palabras en cinco idiomas oficiales. Imaginaros, algunos de los jugadores no sabían ni hablar afrikaans... Ensayábamos debajo de la ducha, fuimos a los 'townships' o barriadas para aprender la correcta pronunciación jugando a rugby con los chicos de color. Se trataba de mover algo, ni más ni menos. La situación se repite ahora.

¿Matt Damon clava su personaje?

Nos fuimos haciendo amigos, al igual que con Morgan Freeman. Les invité a casa. Cociné yo, ravioli y cangrejo. Yendo a un restaurante, no verían cómo era yo; hablamos sin parar, ellos nos contaron historias increíbles de Hollywood… la velada terminó porque se nos acabó el vino

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