Las suspensiones, entre la plaga de incidentes

La combinada masculina, aplazada; un operario se 'cuela' en el descenso

La organización de Vancouver 2010 no tiene un momento de respiro. Del miedo a que las altas temperaturas pusieran en riesgo el normal desarrollo de las pruebas por faltas de nieve a que las tormentas provoquen aplazamientos en las pruebas de esquí alpino o impidan que el público pueda seguir de cerca las comepticiones de snowboard o esquí acrobático.

La suspensión de competiciones es ya un clásico en los deportes de invierno, pero las de Vancouver se están uniendo a una plaga de incidentes que no cesa. Nadie olvidará la tragedia del fallecimiento del georgiano Nodar Kumaritashvili en el peligroso de luge, ya remozado.

La supercombinada masculina de esquí alpino tuvo que ser aplazada ayer debido a la intensa nevada de la noche anterior, a la que se unió la lluvia durante la mañana. Ello ha derivado en un cambio del programa masculino. La supercombinada pasa al próximo domingo, mientras que el gigante se mueve del domingo al martes día 23. Si en Whistler hace mal tiempo, en Cypress Mountain sucede lo contrario, y la humedad y el ambiente cálido han convertido la grada de los espectadores en un lugar inseguro. Como consecuencia, 20.000 espectadores se quedaron sin ver las pruebas de snowboard.

Un 'espontáneo'

El patinaje de velocidad sufrió largas demoras debido a que una máquina de adecuación del hielo falló. Pero peor fue lo sucedido en el descenso masculino. El australiano Craig Branch casi choca con un operario de pista que se metió en el trazado cuando alcanzaba la meta a más de 100 km/h. “Fue muy peligroso, si hubiéramos colisionado el riesgo de lesiones graves era alto”, significó el deportista

Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...