El hijo de Valdés llevará la camiseta azulgrana el domingo

FC BARCELONA

Víctor Valdés hace que su hijo de sólo tres meses luzca una pequeña zamarra culé los días de partido: está convencido de que le da suerte

Este domingo, Dylan Valdés, el primogénito de Víctor nacido el pasado mes de agosto, será uno más de los culés que se colocarán delante del televisor con la camiseta del Barça puesta. No entenderá nada, es normal, con sólo tres meses sólo está pendiente de comer y dormir, algo que hace muy bien, por cierto. Pero la camiseta la llevará seguro. El motivo es sencillo: su padre cree que eso le da suerte. Y es que cuando Dylan nació, el pasado 20 de agosto, el club rápidamente le hizo llegar a Víctor una pequeña camiseta del Barça con el nombre del pequeño en la espalda, como hace con los hijos recién nacidos de todos los futbolistas del primer equipo.

Desde aquel día, Valdés tomó la decisión de ponerle al chaval la zamarra culé cada día que tenía partido. Así se lo dijo a la madre del pequeño: "Cuando juguemos, ponle la camiseta por favor". Dicho y hecho, y lo mejor del caso es que hasta ahora, con su hijo 'apoyando' y vestido de azulgrana, Valdés sólo ha perdido un partido, el del Rubin Kazan, y porque la madera evitó el gol del Barça en dos ocasiones.

La teoría de Víctor sobre el influjo positivo de su pequeño en los resultados del Barça es indemostrable, pero se entiende. Pasión de padre y superstición de portero. Un dato le reforzó: el día del Athletic-Barça, la madre del pequeño Dylan se olvidó de ponerle la camiseta y un partido que parecía encarrilado se acabó empatando. Cuando se enteró el portero, lo tuvo claro: el chaval siempre se pondría la camiseta. Y el día del clásico con más razón.

Víctor está en una nube desde que nació su hijo. El primer mes fue duro, como en la mayoría de los casos. El pequeño, que pesó tres kilos al nacer, se despertaba de noche y el portero descansaba poco, le costaba enhebrar horas de sueño. Incluso llegó a perder un par de kilos. Es lo que tienen los cólicos del lactante, que hacen que los pequeños no duerman por los dolorosos retortijones y que los padres se desesperen por ver a suhijo sufrir. Pero fue pasar el primer mes, los cólicos desaparecieron y Dylan se dedicó a lo que deben dedicarse los lactantes: beber mucha leche y dormir. Los resultados saltan a la vista. Ahora, tres meses después de su nacimiento, ha engordado, ha crecido mucho y es un niño grande para su corta edad. Por cierto, Víctor le puso Dylan al pequeño porque significa "hijo del mar", según desveló en una entrevista en El País. Y es que el mar, junto con el fútbol, es otra de las pasiones del portero barcelonista

“Ahora disfruto mucho del fútbol”

Víctor Valdés cada día se siente mejor. Así lo asegura en la entrevista con MD: “Ahora disfruto mucho del fútbol. y también de los entrenamientos. El Barça es ganar y ganar y eso hace que convivamos con una presión enorme día a día. Los otros años la dinámica era buena, pero a veces los resultados no siempre acompañaban. Ahora sí acompañan y eso ayuda a venir a trabajar con un gran estado de ánimo”.

Víctor admite que se lo pasa “muy bien como jugador, el míster aplica un sistema que tanto defensiva como ofensivamente hace que disfrutes del fútbol”

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