Miguel Madariaga participó el miércoles en las Jornadas sobre el Ciclismo Profesional organizadas por el Club Ciclista Logroñés con el fin de analizar el trabajo de cantera en el ciclismo y su evolución al campo profesional. El presidente de la Fundación Euskadi, que estuvo acompañado por una de sus perlas jóvenes, el navarro de Funes Francisco Javier Aramendia, en una entrevista al Diario de La Rioja dejó algunas 'perlas' sobre asuntos candentes de la actualidad. Madariaga no se mordió la lengua a la hora de hablar de los casos de dopaje que han salpicado esta temporada al equipo. Así, sobre el caso de Mikel Astarloza, el dirigente vasco señaló que es un caso raro. Todavía no ha podido empezar su defensa legal porque este mismo lunes acaba de recibir la documentación del contraanálisis. Sus abogados están a la espera desde el 26 de agosto. Es la documentación que más ha tardado en llegar en el ciclismo.
De forma muy distinta se refirió al positivo de Landaluze: Fue su suicidio. En el equipo hemos hecho este año 750 controles, pero nuestros análisis no marcan ni la EPO ni la CERA. No los detectamos. Tan sólo veíamos que Landaluze andaba ese año lo que no había andado en los dos anteriores.
Por último , sobre la posibilidad de que la Vuelta a España pase por territorio vasco, Madariaga lo tiene claro: Me gusta la idea. La afición en Euskadi es muy fuerte y ahora más con un equipo internacional. Lo decidirán los políticos. La clave es garantizar la seguridad. Presencié una llegada a Pamplona con motoristas de la Guardia Civil por los suelos. Fue un follón importante. El que lo recuerde debe poner los medios para que no ocurra