Francia saldrá hoy a rematar la faena ante Irlanda, a la que el pasado sábado en la ida de la repesca derrotó por 0-1 en Dublín. Los jugadores franceses le temen casi más a su propia afición (muy crítica con el equipo de Raymond Domenech) que a sus rivales y los irlandeses le tienen muchas ganas al madridista Lassana Diarra, a quien acusan de haberles dirigido graves insultos en el Croke Park.
Lassana Diarra se ha convertido en el enemigo público número uno de los internacionales irlandeses, en especial de Keith Andrews, quien aseguró que las palabras de Diarra fueron indignas de un profesional, pero resumen qué tipo de persona es. Lassana Diarra dijo por su parte que si Andrews me busca, me encontrará, fue él quien me dejó marcado el tobillo. El madridista sigue negando haber insultado al pueblo irlandés.
Todo indica que el barcelonista Thierry Henry volverá a jugar por la izquierda del centro del campo, como el sábado en Dublín. Está por ver si Domenech decidirá esta vez darle una oportunidad a Karim Benzema o apostará de nuevo, como acostumbra, por Gignac.
La Irlanda de Trapattoni tiene el orgullo herido y sabe que será difícil, pero no renuncia a dar la campanada e ir al Mundial-2010