El Atlético de Madrid B sigue sin carburar en casa. Los colchoneros aún no conocen la victoria (dos derrotas y un empate). Y lo que es peor es que ayer cayó ante un conjunto que sumó su primer triunfo fuera de casa, y que baja mucho su nivel lejos de las Islas como es el Universidad. En el partido de ayer algunos errores individuales dejaron ver la peor versión del conjunto colchonero. Antonio Rivas tiene muy claro que hacer del Cerro del Espino un fortín es su mayor asignatura pendiente a estas alturas.
Los colchoneros comenzaron dominando el encuentro. Las internadas por las bandas tanto de Keko como de Cedric pusieron en muchos problemas al conjunto canario. Las ocasiones se iban sucediendo hasta que en el minuto 17 Ibrahim se plantó solo ante el meta, éste le derribó y el colegiado señaló penalti. Joshua abrió el marcador al transformarlo. Era el 1-0 y todos se las prometían muy felices. Pero tras un primer aviso de Futre, llegó el empate. Atienza falló en un control y el balón le cayó a Ángel Sánchez que se marchó sólo a la portería para batir a Nacho en el mano a mano. Los rojiblancos tardaron en reaccionar y las mejores ocasiones llegaron de las botas de Cedric, pero no pudieron volver a ponerse por delante.
Tras el descanso, Sergio Rodríguez falló en un pase, el balón le llegó de nuevo a Ángel Sánchez y desde 30 metros se aprovechó de que el meta estaba descolocado para ponerse por delante.
Tras este gol, los rojiblancos se pusieron nerviosos y con más corazón que cabeza fueron incapaces de crear ocasiones claras de peligro, mientras tanto el Uni amenazó a la contra. Ya en los últimos minutos llegó el gol de la sentencia. Jugada de Futre por la derecha, que se la cedió a Gustavo para que este libre de marca pusiera el 1-3. En los últimos minutos, Indiano puso el 2-3 definitivo con un precioso gol desde fuera del área que solo sirvió para decorar el resultado final en un partido para olvidar