Jaime Alguersuari aceptó un reto que parecía imposible al dar el salto a la F-1 sin tets previos. El francés Romain Grosjean ha repetido la misma singladura. Entre ambos hay algunos pararelismos y también importantes diferencias. Son detalles que para la mayor parte de aficionados pasan desapercibidos, pero en el mundo de la F-1 tienen su importancia. Por lo general, las notas otorgadas por diversas revistas internacionales son mejores para Jaime que para el francés, pese a que éste entrara en Q2 y se mostrará más rápido que el español. La diferencia de coche también cuenta.

Grosjean llegaba con algo de experiencia en F-1: unos tests el pasado año y varios 'road show' esta temporada en el marco de los Renault Days, es decir las World Series. Pero, sobre todo, la experiencia de dos temporadas en la F-3 Euroseries y otras dos en GP2, categoría que corre en los mismos circuitos de la F-1, de prestaciones (especialmente en Valencia donde sólo cedían 4” a los F-1 más lentos) y potencia más cercanas y con gomas Bridgestone también similares a las de la F-1. Alguersuari, sólo un año de F-3 y lo que llevamos de temporada en Wold Series, siempre con neumáticos que trabajaban de forma muy distinta a los de la F-1; los Michelin de las World Series, por ejemplo, son opuestas a las Bridgestone.

La diferencia de experiencia es más notable de lo que indican las simples cifras. Si el francés ha disputado 153 carreras, el español ha hecho 122; pero las 30 de diferencia se centran en las categorías más cercanas a la F-1.

Comparativa con Grosjean

Y por supuesto está la diferencia de edad. Los 19 años de Jaime, adolescente todavía, frente a los 23 de Grosjean, que ya debe ser un joven maduro. En el mundo de la F-1, despiadado, Grosjean ha llamado la atención por su capacidad para ir deprisa, pero cometió dos errores, el toque de la salida –disculpable– y un espectacular trompo. Jaime, por no haber cometido errores y mantenido un gran ritmo de carrera. “Al menos con los neumáticos duros porque con los blandos tuve demasiados problemas ya que se degradaban”.

El español, que antes de Valencia pensaba que podía entrar en la Q2 con un poco de fortuna, reconoció que “quizás pequé de optimismo. Está claro que entrar en la Q2 va a ser muy difícil. La calificación es quizás el aspecto que más tengo que trabajar pero eso requiere tests y están prohibidos. Pero di otro paso, estuve más cerca de los de delante. ¿Más diferencia con Buemi que en Hungría?. Valencia es bastante más largo”.

Y por eso se prueba en otros desafíos. Ayer estaba en Nápoles ensayando el Mundial de Karting de 125 con cambio que debe disputar el 6 de septiembre en Sarno. Y piensa en las World Series Renault “para seguir mejorando. World Series es una categoría muy dura, especialmente para los novatos. Estoy luchando con pilotos que tienen tres y cuatro años de experiencia en la categoría. Pero ya gané la última carrera y aunque el título está muy difícil, intentaré alcanzarlo”. Son dos desafíos más “porque necesito carreras, ganar experiencia”, dijo Jaime

Grosjean, pluriempleado

Tras el G.P. de Valencia, Romain Grosjean voló rápidamente hacia Ginebra. “Todavía no me he despedido de mi trabajo en el banco”, dijo para justificar sus prisas. Grosjean trabaja de cajero y sus jefes le dan todas las facilidades posibles.

El francés espera verse confirmado para 2010 para pedir una 'excendencia'