Menos de ocho semanas. Algo más de 50 días. Las miras de todos los rojiblancos están puestas ya en la cita que el próximo siete de agosto tendrá lugar en Nyon. En esta ciudad suiza se decidirá qué equipo será el último en cruzarse con el Atlético en su camino hacia su segunda participación consecutiva en la Champions League.
Aunque la impresión generalizada dentro del propio vestuario era la de que en esta ocasión la entidad de los posibles rivales no iba a ser tan seria como en la pasada previa, la realidad marca que pueden verse las caras con un verdadero 'coco'. En el seno del equipo apostaban porque su coeficiente UEFA había ascendido considerablemente con su llegada a los octavos de la pasada Champions, al igual que con su llegada dos años atrás a la misma ronda en la Copa de la UEFA. Y así es. Sin embargo, la realidad dictamina que el adversario que pueden tener en frente puede ser incluso de un caché superior al del Schalke alemán, escollo en la pasada previa de Champions.
La decisión de la UEFA de dar entrada directa a la liguilla al tercer clasificado de la Liga italiana, inglesa y española tiene como contrapartida que los colchoneros puedan cruzarse con equipos de la talla del Arsenal o el Olympique de Lyon a finales del mes de agosto.
La mayoría de los futbolistas prefirieron marcharse de vacaciones sin fijarse demasiado en las posibilidades que les podía deparar el sortero. El año pasado el Schalke también parecía un rival muy duro y conseguimos nuestro propósito. No debemos pensar en eso ahora, aseguraba Diego Forlán entre otros. Sin embargo, Abel, su cuerpo técnico y la dirección deportiva ya trabajan en el modo de conseguir llegar de la mejor forma posible a una cita para la que aún restan 66 días y que puede ser de 'campanillas'.
Las fechas, 18/19 y 25/26 de agosto están ya grabadas a fuego en la mente del técnico. Sabe que esa será su primera prueba de fuego y que buena parte de la temporada próxima dependerá de que el Atlético consiga superar el último control de acceso a la máxima competición europea. El equipo se presentará a la cita con cinco semanas de trabajo completadas y sin ningún temor. El entrenador de Velada, valiente, asegura en conversación con MD que no hay que fijarse tantos en los rivales y pensar más en el potencial propio. Para Abel, el coco es el Atlético. La previa no va a ser fácil, pero tampoco será para nuestro rival. Nosotros también seremos 'cocos' para ellos. Se crea una psicosis pensando que nos pueden tocar grandes equipos, pero nosotros también lo somos. Tenemos que prepararnos bien para llegar a esa cita.
Con todo el arsenal
Lo cierto es que la pasada campaña también había rivales de campanillas como Liverpool o Juventus. Había otros más accesibles como el Steaua de Bucarest. Y el enfrentamiento final acabó siendo ante el Schalke, a quien le endosaron cuatro en una noche mágica en el Vicente Calderón.
Lo cierto es que ya existe cierta ansiedad por conocer el rival. Competir o no en la Champions mantiene en suspense los recursos de los que podrá gozar el Atlético el curso próximo. Se teme incluso que una posible eliminación en la previa abra la puerta de salida a alguno de los cracks. La suerte es que para este partido, y si los movimientos del mercado y los lances de la pretemporada no dictaminan lo contrario, Abel sí podrá contar con todos sus hombres. Cabe recordar que Aguirre no pudo disponer del Kun en la ida de la pasada previa.