Ya lo dijo Gregorio Manzano esta semana: habría que hacer dos pasillos al Barça. Uno al principio del partido y otro después del descanso. Uno como campeón de la Copa del Rey y otro como campeón de Liga. El Barça empieza en el Ono Estadi a pasear el doblete. Le quedarán dos partidos más, en el Camp Nou y en Riazor, en esta particular rúa de la Liga y la Copa. La cuestión es que el Barça viaja a Mallorca para recibir el homenaje de la afición bermellona, así como de los barcelonistas de la isla, y Guardiola puede ir preparando ya la final de la Champions del próximo día 27, en Roma. Como el Manchester, que también se proclamó ayer campeón de la Premier.

Pep Guardiola había preparado la cita de Mallorca con toda la prudencia del mundo, exigiendo a la plantilla la misma implicación y el mismo compromiso que el técnico les ha reconocido durante toda la temporada. La lista de convocados, antes de la derrota del Madrid en el Madrigal, incluía a todos los jugadores de la plantilla. El técnico barcelonista había negado, en Sant Joan Despí, la existencia de un plan 'B': “Falta un punto y tenemos que salir a competir, como siempre. Ahora mismo no contemplo nada que no sea el equipo más competitivo. Ya pensaremos en la Champions cuando la Liga esté ganada”, había comentado.

Desde poco antes de la pasada medianoche, el Barça ya es campeón de Liga, por lo que los futbolistas del filial que se habían entrenado con el primer equipo durante la semana (Gai Assulin, Xavi Torres, Abraham, Thiago, Botía, Fontàs y Jeffren, que se incorporó ayer) ya pueden ir preparando la bolsa de viaje a la espera de la posible llamada de Guardiola para poder dar descanso a algunos de los pesos pesados que llevan más minutos.

Respeto por el Mallorca

El técnico, en cualquier caso, mantiene mucho respeto por el rival: “El Mallorca jugará con su mejor alineación posible, un equipo experto con defensas de verdad y con intención. Es el tercer equipo con más puntos de la segunda vuelta”, recordó. Apuntó también que “si aquel penalti de Martí hubiese entrado, habríamos quedado eliminados de la Copa”.

El conjunto barcelonista, en cualquier caso, puede encontrarse con una nueva modalidad de celebración: antes de salir hacia el punto de destino. La plantilla está convocada a las 9.30 en el Camp Nou y el vuelo del Barça hacia Palma partirá del aeropuerto del Prat a las 10.30 de la mañana. Por la noche, llegará sobre las 23.30

Alicientes y orgullo

Al Barça le quedan todavía algunos alicientes para los tres partidos de Liga que le quedan por disputar. El más significativo, ir a por el récord de puntos en un campeonato de Liga, que aún ostenta el Madrid de Capello de la Liga 96-97, con 92. Y, como dijo ayer Pep, “la obligación y el orgullo de ganar”